20.000 dólares por un cadáver

"20.000 dólares por un cadáver"

En 1969 José María Zabalza dirige unos westerns mediante el sistema que los americanos denominan back to back. Consiste en rodar simultáneamente con el mismo equipo técnico y artístico, utilizando los mismos decorados dos películas distintas. Dispuesto a superarse a sí mismo, los westerns serán tres: Plomo sobre Dallas, 20.000 dólares por un cadáver y Los rebeldes de Arizona. Los plazos de rodaje son de dieciocho días para una de ellas y doce para cada una de las otras dos, lo que equivale a un total de siete semanas.

Carlos interviene, al menos, en 20.000 dólares por un cadáver. De la Riva se lo ha llevado al rodaje para que trabaje como figurante. Lo presenta como “su secretario” lo que indigna a Carlos que se siente actor de corazón en tanto que el caballista sólo tiene planta.

La cinta relata una tradicional historia de venganza. Bruce Dale (Miguel de la Riva) mata al malvado Burkett (Fernando Sánchez Polack) cuando éste entra a robar en su rancho. Al querer cobrar la recompensa -los veinte mil dólares del título- se ve envuelto en una guerra entre los responsables del ferrocarril y el jefe de la banda de pistoleros de la que Burkett formaba parte, contratados por el servicio de diligencias para estorbar el tendido de la vía. A pesar de las súplicas de su mujer (Dianik Zurakowska), cuando los forajidos queman su rancho Dale aprende a disparar a marchas forzadas y se convierte en agente del ferrocarril.

20000Dolares_1

Cuando el figurante que hace de barman consiga exasperar a Zabalza por su acentuado deje castizo y su desmemoria le llega a Carlos su oportunidad. Se viste con un chaleco, una corbata de lazo y un mandilillo blanco y trajina de la barra del saloon a las mesas. Desgraciadamente, en la copia de la película que hemos podido ver, no abre la boca, aunque él recordaba nítidamente el “dos güisquis, al momento” que lo convirtieron en “actor con frase”.

Deja un comentario