Despido improcedente es la penúltima película del veterano Joaquín Luis Romero Marchent. Está protagonizada por Juanjo Menéndez y Jesús Puente, pareja de hecho por el éxito teatral de Violines y trompetas… y por un spot de atún en conserva. Interpretan a un par de abogados en plena época de conflictos laborales, aunque para ellos parecen más importantes los líos sentimentales.
Carlos tiene un breve papel como conserje del juzgado al que Juanjo Menéndez le arroja una toga. En un gag que se intuye de cosecha propia, Carlos se lleva la prenda a la nariz para comprobar si es que huele mal.
A pesar de que no tiene frase en el montaje final aparece acreditado en el rodillo de salida, aunque ocupa el último puesto.