
Mi Rosita (2000), es un cortometraje dirigido por Angels Diemand-Hartz. El argumento es el siguiente: Rosita (Nadala Batiste) quiere irse de viaje con Salustiano (Carlos). Sin embargo él no esta dispuesto a moverse de su confortable sillón pese a que el tendero (Txema Blasco) le tiene muerto de celos.

Lo que recuerda Carlos: «Fue un mediometraje que hice en Barcelona. Yo era un inventor y tenía celos de un frutero. Iba a la compra y al cruzar una calle iba otro señor mayor con un molinillo que le daba aire en el sombrero y pasaba con un carrito. Se ve que yo tuve envidia de él y al día siguiente le hice comprarme un carrito de esos a mi señora. Después de lo de la frutería, nos encontramos y nos ponemos a hacer carreras los dos. Vamos por una calle estrecha, con escaleras, y figura que yo me mataba. Luego, en el velatorio veía entrar al frutero y dar un abrazo a mi señora y un beso. Entonces yo me incorporaba y le daba un puñetazo al otro, que me quedó muy bonito, como si fuera Glenn Ford. Y ya, como si nos fuéramos a Benidorm. Se quedan la Azucena y la Violeta (Carmen Contreras y Amelia Rica) con el frutero, que figura que les pega un pellizco en el trasero. Pero yo digo: Sí, sí, pero mi Rosita es mía”.